miércoles, 28 de mayo de 2008

Jugando con fuego...encontró la muerte.

Posteado por:Ricardo Abrines Benguria. 15/05/2008 21:45[ N° 267,268 ]


Señor Sergio Cruzat Medina [ N° 158 ]

Usted realmente cree que una mañana los militares chilenos se despertaron y dijeron: -¿ Qué aburrido, que hacemos hoy día?Que les parece un Golpe de Estado.¡¡A que entretenido!! ¿Golpe de Estado? Pero... ¡¡ nunca los militares han derrocado a un gobierno !!No importa, en eso nos vamos a entretener. ¡¡Y lo hicieron!!
Y fueron entonces los pobres upelientos que no estaban haciendo NADA, los que pagaron los platos rotos Pobrecitas la palomitas..¡¡QUE HIPÓCRITAS MAS GRANDES!!Ese tipo de novela espera que HPDA le escriba...




Don Germán Quintana [ N° 189 ] Usted menciona a Rodrigo Rojas, su madre Verónica Denegri de linea marxista/leninista (estos son los violentos) escapó (de algo) llevándose a su hijo de 9 años, no a Cuba o URSS, sino a aquel país que no una vez, pero cien veces escupió, quemó y pisoteo la bandera de las 50 estrellas(hipócritas).
Se hizo muy amiga del liberal Edward Kennedy, y se dedicó a disparar mierda no a los militares, sino a todos los chilenos que se quedaron a trabajar, empezando por reconstruir el país.
Consiguió como buena patriota chilena, que senadores y Carter le hicieran un bloqueo económico no a Chile, sino a todos esos patriotas que trabajaban exportando todo lo que no estuviera clavado al suelo, pero ella y Kennedy seguían tratando de aportillar la floreciente economía chilena, gracias a ellos, este buscó nuevos mercados como Asia y Europa y superaron el bloqueo económico. Su hijo regresó a Chile después de TRECE (13)años y lo "primero" que hizo, en desgracia, por el odio impregnado por su madre por años, fue enfrentar nada menos que a los mismos militares, ni siquiera fueron Carabineros, soldados entrenados no para poner orden público, son entrenado para proteger la patria y para matar.
Es una lástima lo que ocurrió, pero la verdadera culpable es la madre, que desde muy lejos, llenó a su mismo hijo, de odios tan grandes, que jugando con fuegos encontró la muerte...Es muy triste, pero yo quisiera que la gente se detuviera de culpar a todo el mundo de sus propias decisiones, y finalmente se hicieran responsables de ¡sus propias acciones!.

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